miércoles, abril 02, 2003

La vida es una mierda.
Es poco original decirlo. Se que es un lugar común, pero eso no quita que la vida sea una mierda.
Hay veces que lo es menos, pero eso da lo mismo.

Este es el primer mensaje y me imagino que el gusto de escribir para mi mismo durará poco. Lo he visto en otros espacios, en otros blogs. Se empieza con un discurso hacia adentro y de pronto se transforma en un deseo de diálogo.

Mierda, todo el transcurso del carro pense en mil cosas y de pronto ya no me dan ganas de hablar.
Creo que es poco lo que dire por ahora, es tiempo de un trago, un poco de música y esperar. Esperar a que alguien postee algún mensaje que me permita leer otro rato. Bloguear en mi caso se presenta como la oportunidad de perder un poco de tiempo en espera de que alguien prenda su computadora y mande una señal.
Quizás sea ese sentido de invasión a la privacidad consentida lo que lo vuelve atractivo.
En mi caso, la vida cotidiana, la vida común es normal. No hay historias extrañas, no hay cachondeo ni critica de música por el momento. Soy un pequeño burgues.

Mi vida se va lo mismo en keith jarret que en Caifanes, o lo que fue de caifanes.Mi vida es un juego entre un concha y toro que un buchanas 18 años de 23 dolares de UETA. Mi vida es normal, es poco lo que puedo ofrecer excepto las crisis existenciales convertidas en cliches, en lugares comunes de nuevo.

Soy ese personaje de Loriga que ha planeado matar a su jefe y ha llegado el gordo minutos antes a robarme mi plan. Estoy ahora a la espera de ser el empleado del mes.

Y lo peor, soy estupidamente optimista. Se que de origen nadie es un optimista en estas circunstancias. Un optimista no escribe, vive. Estar frente a una computadora escribiendo monólogos, narrando desventuras-analisisconcienzudos-divertimentossobrelaexistencia no puede ser de optimistas. Pero como lo dije la vida como burgues ofrece la posibilidad de ser optimista. Quizás se puede ser cínico, pero no se, eso sonaría petulante.

0 y tú que piensas?: