Se puede ser más estúpido?

En medio de la tensión racial que vive Estados Unidos, luego de las propuestas migratorias, las marchas y el anuncio del boicot, ahora a un imbecil se le ha ocurrido grabar el himno nacional de Estados Unidos, traducido al español.
La justificación es estúpida y limitada. El productor, dueño de una casa productora de Reggeaton, llamó a interpretar y al parecer así quedó, a Gloria Trevi, Kalimba, Franco de Vitta. No conforme con eso, a la mitad del himno y ahí si en inglés, aparecerán frases contra las políticas migratorias gringas.

Vuelvo a lo mismo...se puede ser más estúpido?

Por cierto, el productor de marras es inglés.


Hace unos días que me preguntaba si el boicot será buena idea o no. Me parece que de fondo no ayuda a nada. Creo que las marchas demostraron la fuerza del movimiento hispano y de lograr algo entre los legisladores bastaba eso. El llamado al boicot me parece más un protagonismo de parte de algunas organizaciones que pretenden justificarse y tomar las banderas que de alguna forma surgieron de manera natural con las marchas.

Lo de no comprar nada ese día pudiera ser mejor que el llamado a no acudir a trabajar, justo cuando se ha difundido las repercusiones que tuvieron las marchas en los trabajos de muchos hispanos en distintas ciudades.

Leyendo algunas declaraciones, un dirigente empresarial de Dallas decía que posiblemente se note el boicot, pero de la misma forma que se nota cuando en esta ciudad cae una lluvia fuerte.

Me parece que es un paso de más. De por si las marchas han incrementado la tensión entre las distintas razas aquí en Estados Unidos, como para buscar polarizarlas al extremo. Sin embargo, me preguntan si participaré del boicot. A medias. No pienso dejar de trabajar, pero no pienso comprar nada. No creo que funcione el boicot, pero nada me cuesta apoyarlo.

El Secretario de Seguridad Pública de Baja Callifornia, Manuel Díaz Lerma, fue recibido a balazos cuando iba a su oficina en Mexicali. 657 casquillos percutidos se encontraron en el lugar, la mayoría de ellos disparados por R-15. También se lanzaron dos granadas, una de ellas abrió un poqute en ell techo de lo que parece ser (según veo en las fotografías) una expedition donde iban sus guardaespaldas. 657 disparos y no le pasó nada, excepto el susto, gracias al blindaje de su camioneta.

Ayer me preguntaron varias veces... no extrañas reporterar en Tijuana.... no lo se. No estoy seguro. Probablemente de seguir allá estaría en estos momentos en Mexicali. Probablemente de un lado hacia otro, con entrevistas. Fumando ocasionalmente un cigarro, presentes solamente en momentos así. Estaría con una mezcla de emoción. Pero junto a eso, una nausea permanente, un asco a ese tipo de noticias, por la noticia en si como por el ambiente que deja en el ambiente.

Vi el debate. Por internet, porque la televisión en Estados Unidos - al menos en Dallas - no lo pasó. Me quedé con las ganas de ver los programas de análisis.
Yo siempre he dicho que los debates sin mentadas no son debates. Y el de ayer se pasó de decente. Quería ver lodo. Para que oir propuestas, ya esas las había leído en internet. Lo que uno quiere ver es que se ataquen, que se desgreñen, que cuenten anécdotas como la del sildral y la cerveza.

Que si quién ganó? No creo que se haya ganado nada. Patricia Mercado dicen que fue la más centrada. Claro, como sabe que va a perder puede darse ese lujo. Si estuviera arriba en las encuestas no haría planteamientos como los que hizo. Es la ventaja de ser un perdedor seguro, puedes tomar ciertos riesgos, puedes jugar al gran político.

Creo que hizo falta la presencia del peje. Le hubiera dado otro tono. Me imagino que se habrá arrepentido. Au ausencia no pesó como lo había planeado. Al menos no me tocó ver el podium vacío.

Ayer busqúe en internet algún video del debate de Fox con Labastida. No lo encontré. Me parece que varios de los planteamientos de Calderón son idénticos a algunos de Fox. Seis años y seguimos igual. Es como oir al PAN en BC hacer campaña a favor del cambio. 17 años después siguen creyendo que son el cambio.

LAS CHACHALACAS

Me entero leyendo al Sueco que existe una página llamada chachalacas.org que viene a ser algo así como un blog-foro de ataque al peje y defensa de Felipe Calderón. Me entero además que algún bienaventurado puso por ahí mi dirección del blog, com referencia.

Se agradece, aunque sinceramente me extraña. Me extraña porque jamás he dado aquí una palabra a favor de Calderón y mis críticas contra AMLO han sido las normales.

Pero que sucede. Sucede que como siempre, nuestra vida política está formada en torno al "si no estás conmigo estás contra mí". No es el primer foro donde veo cuestiones así. Por lo general en cualquiera de política se polizan las posiciones, al grado de que son incapaces de ver la paja en el ojo propio. Es difícil encontrar a un simpatizante del PRD que reconozca la afición de su candidato por la opacidad. Es obvio que la transparencia no es lo de AMLO. De mil formas se puede ver. Es un hecho que el peje no soporta las críticas, por más bienintencionadas que estas sean. Hay casos específicos, por ejemplo, ej hecho de su incongruencia en el trato a los medios. Llega a Tijuana y cuando le piden una entrevista exclusiva (fue el caso de Zeta) la respuesta fue que el no daba entrevistas a diarios locales porque se le enojaban los reporteros nacionales que venían en el grupo, comúnmente llamado pool.
Pero, dos días después declara en la Ciudad de México - la nota salió en TV Azteca - que los medios de comunicación locales han emprendido un compló en su contra, que no le hacen caso. Eso es incongruencia.

Por el lado del PAN las cosas no están mejor. Todo le perdonan a Calderón y encima de eso todo lo hecho por Fox está perfecto. No pasa nada en México. La inseguridad, las promesas incumplidas, los casos de corrupción, todo se desvía atacando al peje. Que si el yunque se está apoderando del partido, no importa, lo importante es que el peje dijo groserias. Es la misma porquería en los dos lados.

Claro que en mi caso estoy en un lugar cómodo. No tengo que comprometerme con ninguno de los dos candidatos. Me da lo mismo. Como quiera que juegue pierdo. Así lo dijo Jorge Negrete en la película Dos Tipos de Cuidado. Si el PRI tuviera posibilidades es posible que me preocupara. Como no las tiene, me da lo mismo. Los dos candidatos me parecen malos y eso de votar por el menos malo no se me da.

No pienso votar. No vale la pena. Ese es mi mensaje de hoy. Y el de ayer.

Por cierto... Sueco.. mucha pregunta y usted no contesta... por quien va votar, si AMLO no representa a la izquierda (según lo dijo usted mismo)

SUICIDAS ARGENTINOS

Gracias a un compañero del trabajo pude leer el primer capítulo de un libro-crónica de una periodista argentina llamada Leila Guerriero.

El libro se llama Los Suicidas del Fin del Mundo y es una historia sobre un pueblito argentino donde jóvenes se han ocmenzado a suicidar. El tema es lo de menos, lo que me encantó es el tono, el manejo del lenguaje. Narraciones así valen la pena. Obviamente después de leer el avance publicado por El Clarín decidí comprar el libro. Espero recibirlo en una semana.

Servirá de algo el boicot del 1 de mayo???

APUESTAS

En 1988 había sido la última vez que acudí a una carrera de caballos. Se trataba de una carrera importante, el "Clásico Internacional Del Caribe". Antes de esa, muchas veces había acompañado a mi padre a las carreras de caballos. Le gustaba jugar leyendo el programa, leyendo estadísticas. No íbamos muy seguido, una vez cada dos meses. Siempre nos quedábamos seis o siete carreras. De esas, yo podía apostar a dos, algunas pocas veces llegué a ganar. Eran definitivamente otros tiempos. Llegaba gente de todas partes a jugar al Hipódromo Agua Caliente. Dicen que lo mismo sucedía con los toros. Desconozco qué pasó con los toros, pero en los caballos estuvo la mano del hoy flamante alcalde de Tijuana.
Esos recuerdos del hipódromo son agradables. Tenía mucho que no los recordaba.
Aprovechando el fin de semana santo, nos fuimos el sábado a conocer un hipódromo ubicado entre Dallas y Fort Worth. La experiencia fue agradable, sobre todo porque había un clima excelente, cerveza de barril y música en vivo. De las carreras, gané la segunda. No pagó mucho, era quiniela. 30 dólares que sirvieron para que el paseo resultara gratis.
El domingo también fue de apostar. Es una debilidad. Disfruto todo el escenario, aunque solamente he estado una vez en Las Vegas, bastó para que me encantara.
Decidimos conocer Oklahoma, un par de lagos. De ida paramos a desayunar en un casino, el primero cruzando la frontera entre Texas y Oklahoma. 10 minutos de juego, 60 dólares de ganancia. De ahí salió para la comida y la gasolina.

"Just gonna have to be a different man
Time may change me
But I can't trace time"
David Bowie


La marcha del domingo pasado me dejó una espina, una molestia permanente que dudo que por el momento pueda quitármela. No se trata de ningún rollo político, no se trata tampoco de algo ideológico. Simplemente el domingo comprendí que soy periodista, que me gusta el periodismo y que no hay nada que pueda hacer.
Hace algunos meses tomé la decisión de retirarme. De cambiar de giro y dedicarme a otra cosa. Pensé que no habría problema. 10 años dedicado a escribir notas, siete de ellos en el mismo periódico. Era necesario cambiar de aires y vaya que fue un cambio radical.
El problema está en que al bajarme del tren y comenzar a caminar en la marcha, tomando fotos, sentí la adrenalina, el deseo de clavarme en la reporteada de nuevo. Solamente quien ha trabajado en esto sabe esa combinación de excitación y acelere que da el periodismo. Es adictivo.
Y es distinto a lo demás, distinto porque la reporteada, el momento preciso da una experiencia y el convertir esa experiencia en palabras frias es un reto que da placer. No hay romantisismo, no hay literatura, no es como el periodismo que vemos en el cine. Es velocidad, es cortar, discriminar y escribir. Ya después vienen los editores y le dan en la madre a todo, pero ese es otro cantar. Ese ritmo, esa presión, de repente hace falta.
Y sin embargo, repito, no hay nada que por el momento pueda hacer. La decisión que tomé de venirme a vivir acá fue pensada mucho, sobre todo en materia económica, familiar, pensando en el futuro del pequeño Nemo. No hay nada que hacer, excepto aprovechar cualquier pretexto para lanzarme de nuevo a la calle a escribir un par de líneas.

MARCHA

Soy una contradicción, lo he sabido siempre. Hoy no fue la excepción. De último momento nos trepamos al tren y llegamos al centro de la ciudad, donde ya nos esperaba medio millón de personas.

Debo decir, en mi descargo, que fui con un interés periodístico. Uno lo trae en la sangre. No se lo puede quitar. Hoy sin duda sentí algo nuevo, que luego describiré. Por lo pronto diré que nunca había vistoo una manifestación así. Y es que Tijuana no se distingue por lograr marchas numerosas.

En fin...que aquí va lo que escribí al respecto...

WE LOVE THIS COUNTRY
"Qué chingón, man, qué chingón", decía un joven veinteañero mientras desde el tren comenzaba a observar la larguísima fila de manifestantes vestidos de blanco.

Faltaba aun una estación para llegar al lugar indicado y la gente comenzaba a pegarse a las ventanas sorprendidas del nivel de respuesta de la marcha.

Contrario al ambiente del tren de la línea roja que diariamente lleva empleados a las oficinas del centro de la ciudad, ahora los vagones se llenan de gritos, de comentarios y de una excitación que va aumentando conforma se avanza.

Apenas al bajarse del tren uno se vuelve parte de la marcha - la mega marcha del orgullo hispano - ya que no hay espacio para caminar, la comitiva superó las expectativas y de la estación a la Catedral ya no hay espacio libre.

De ahí en adelante todo es caminar, gritar, sonreír y sentirse parte de un movimiento inédito en esta ciudad con un millón de hispanos. A diferencia de las ciudades californianas, aquí los mexicanos no se sienten solos, la comunidad del centro y sur de América está presente y unida.

"We love this country", dice una enorme cartulina llevada por una joven. Las camisetas rezan "Hecho en México, perfeccionado en USA".

La gente no se detiene, viven el momento.

Llegar a la plaza del City Hall sirve de clímax. Se empiezan a oir las voces en inglés, de esos jóvenes que nunca han pisado otra tierra que no sea Estados Unidos y cuya presencia está para defender a sus padres, algunos indocumentados. No hay un falso nacionalismo. A pesar de las cientos de banderas de Estados Unidos, prevalece un sentimiento de verdadero orgullo por el suelo que se pisa.

Aunque de fondo se escucha a voz de algunos de los organizadores que ha tomado el micrófono, la gente no parece escuchar, sigue admirada viendo a un lado y otro. Platican, se imponen los acentos. Se vuelve una kermesse, un simple día de campo.

A diferencia del ruido en las calles, al llegar a la plaza se dejan de lado los gritos de "Sí se puede, sí se puede", para dar pie a los comentarios, a la admiración y al orgullo.

Las peticiones, plasmadas en cientos de cartulinas, mantas, consignas gritadas, son lo de menos. El paso importante, la presencia física que demuestra unidad, ha superado todo lo esperado.

DE CUADROS Y MEMORIA

A veces uno no se da cuenta cuando alguien le da una lección. Es en medio de pláticas cotidianas, de comentarios al margen o de simples observaciones como uno aprende cosas, la mayor parte de las veces sin saber. Y esos maestros generalmente no los valoramos en el momento, en muchos casos ni siquiera nos damos cuenta.

Aprovechando que regresé a la oficina y pude pasar aquí mi hora de almuerzo, luego de una semana de trabajar fuera, decidí salir al museo. Justo a dos cuadras de la oficina está el Dallas Museum of Art. Cuatro pisos con diversas exposiciones. La principal es en estos momentos una sobre el arte maya, a la cual por cuestión de tiempo no entré.

El caso es que decidí empezar por el segundo piso y me topé directamente con arte euroopeo. No había avanzado ni 20 metros cuando los recuerdos me llegaron de golpe y me hicieron llorar. De pronto recordé a mi abuela. Ella pintaba, era su pasión. Pero no solamente pintaba bien sino que disfrutaba la pintura.

De pronto al caminar por el museo recordé sus visitas a Tijuana. Fue una abuela a distancia pero no por eso menos querida. Fue una abuela a la que no le podíamos decir abuela porque no le gustaba, prefería que la llamaramos Lupis, como todo mundo le decía.

Al caminar por entre los cuadros recordé varias visitas a los museos de San Diego. Sus comentarios respecto a los cuadros, su forma de ver el trabajo colgado en la pared. Y de ahí aprendí a ver el arte de forma distintas, con calma, con relajación, con ánimo. Como si estuviera a mi lado comencé a avanzar y ver cada uno de los cuadros. Me detuve en lo particular en uno llamado River Bank in the Springtime, de Vicent van Gogh. Y recordé lo que me dijo una vez, que no hay experiencia mayor que ver un cuadro de frente. Ver que está vivo y en el caso de Van Gogh, descubrir porque era un genio, porque los pincelazos toscos que dejaban las plastas de pintura se transformaban en algo bello.

Dos horas pude caminar por el museo. Es obvio que no será la última vez que vaya. Me gusto relajarme un rato, salirme del trabajo. Me gustó recordar a mi abuela y darme cuenta que la extraño.

TRESPATINICIDIO

Cuando era niño, solía leer revistas. Mi padre era dueño de una distribuidora y gracias a ello, solía tirarme en una pila de revistas a leer, lo mismo Memín Pinguín, que Lágrimas y Risas.
Leía comics, fotonovelas. De todo. Las que más me gustaban eran las de Kallimán.

Además, solía escuchar mucho radio. No tanto por gusto. La señora que nos cuidaba y que vivió con nosotros como 12 años solía poner radionovelas. De nueva cuenta, yo disfrutaba a Kalimán.

Hace unos días me pasaron un enlace que me encantó, sobre todo porque me regresó a esos años. Me imagino que eran repeticiones de programas. No tengo la más remota idea de cuando se grabaron, el caso es que hay en internet una página con los programas de Trepatine y la tremenda corte.... Tres Patines es una delicia por el tono ingenuo de sus chistes. Vale la pena oir un par, aunque se tarda un poco en cargar...http://www.latinamericanstudies.org/trespatines.htm (como esto en una Mac, no me permite poner un link directo)

Algo extraño de mi tierra. Esa costumbre de ver vida en las casas, sobre todo en la noche.

En las últimas semanas nos hemos dedicado a realizar un sano divertimento que consiste en ver zonas donde podríamos vivir. La idea es comprar una casa en unos seis meses. Los precios aquí lo permiten. Pero me llama la atención que después de las siete comienza a prevalecer el mismo ambiente. Las calles lucen vacías, no hay niños jugando en ellas, ni en los patios, no hay gente caminando, no hay ruido. Al fondo se puede observar una luz, señal de que los integrantes de la casa están observando la televisión.

Extraño eso, extraño ver movimiento en las calles. Poder salirme al patio y ver a la gente pasar.


.....

El pequeño Nemo aprende inglés poco a poco. En la casa solamente hablamos español, pero ha comenzado a jugar con algunos vecinos, la mayoría de ellos afroamericanos (nótese lo políticamente correcto que me he vuelto).

Se emociona de descubrir las diferencias entre los idiomas. Se emociona de descubrir que las caricaturas que ha visto siempre están en inglés, el idioma que está descubriendo.

Y llegó ayer con una nueva frase: Oh Man!!

Bienvenido Paisano

En medio de las marchas hispanas, hay un tema del que quería hablar. La comercialización y promoción, sobre todo en el sexenio de Fox, del concepto de Paisano.

En la televisión local, aquí en Dallas, aparece un comercial raro, que parecería ser pagado por la diósesis. Es un comercial dedicado al nuevo santo Juan Diego. En él se habla de las bondades del indio que vio a la Virgen de Guadalupe y hace una larga mención de los milagros que hizo.

Al final, como para no dejar dice algo así como "como sabemos que tu tiempo es sagrado, compra tu tarjeta telefónica San Juan Diego, que te da mas minutos en tus llamadas a tu tierra. La tarjeta de los paisanos".

Qué demonios fue eso. No lo se, lo sigo investigando. Pero eso si, me queda claro que creen que el paisano es estúpido (además de guadalupano) y que con la sola imagen de Juan Diego van a hacer que se gaste su dinero.

En lo personal no me siento paisano, no me siento dentro de ese concepto, aunque suelo hacer chistes de eso. En la reciente visita a Tijuana bromeamos mucho con eso del cliché sobre el paisano....el que llega a la Comercial Mexicana y se surte de galletas gamesa, jabon ariel, salsas picantes. Llegar a comer tamales, birria, menudo.

Desconozco si hay quien se sienta a gusto con el término paisano. De los mexicanos que he conocido aquí ninguno se siente paisano, aunque hay una diferencia entre quienes estamos legales y quienes no. Los legales somos más brutos en los trámites burocráticos.

Para rentar un departamento sufrí algunas semanas, pues a falta de seguro social las puertas se me cerraban, lo mismo con la aseguranza del carro y no se diga de la licencia. Sin embargo unos nuevos amigos, indocumentados pero viviendo aquí más de 5 años, han logrado obtener todo sin enfrentarse al problema de la burocracia.

Las marchas de hispanos en distintas ciudades de Estados Unidos me generan opiniones encontradas, pues por un lado me parece que tienen un origen legítimo. El problema es la forma. Y es que el rollo del nacionalismo y el patriotismo mal entendido siempre me ha generado molestia.

Qué pensaríamos si un grupo de gringos marcharan por las calles de Tijuana, con sus banderas y tirando al suelo nuestra bandera. No se. Veo en la televisión las imágenes de las protestas y es la forma la que me molesta. Es dar argumentos no solamente a los clásicos racistas de siempre, sino también a un sector hispano, establecido, que lo ponen frente a la espada y la pared.

Sirven de algo, probablemente sí.

El precio, me parece que está por verse.