viernes, abril 23, 2004

TOROS DE TIJUANA O COMO ESTAR A LA MODA

Ahora resulta que no hay nada más IN que ir a los Toros de Tijuana. Lo más patético es que dentro de esa ola ahora también Chuy González es IN.
Por alguna extraña razón que no alcanzo a comprender, los panistas decidieron tomar como estandarte el beisbol tijuanense y cada juego sirve para tomar cervezas, dejarse ver un poco y saludar. Es decir, para estar IN.
No les bastó con hacerle eso al Ruben Hood, con invadir El Potrero y el Palmazul (sinceramente esos dos lugares me tienen sin cuidado), pero ahora han tomado por asalto las gradas del estadio de los Potros ( es y seguirá siendo el estadio de los Potros).
He ido un par de veces a ver jugar a los toros (albricias, estoy IN) y me pareció divertido. Lástima de los panistas.

Mi relación con el beisbol viene de muchos años atrás, desde que un día decidí (no estoy seguro de que fuera decisión mía o de mi papá) jugar en un equipo. Tras buscar opciones encontramos uno que entrenaba en otay, yo tendría unos 10 años.
Empecé a entrenar, teniendo como posición el filder izquierdo. Jugar filder en un equipo de beis equivale a ser portero en uno de futbol. Es reflejo de que eres una bestia en el peor sentido de la palabra.
Y sí, resulté una bestia para jugar. Al mes de entrenar, me compraron mi uniforme, que a final de cuentas era lo que más valía la pena. El equipo llevaba como nombre Padres y no se si era un mal karma, pero éramos maletas. Debo corregir, no éramos maletas, sino ERAN maletas. Mi historia en el equipo se quedó en dos juegos, ya que en pleno partido me dieron un pelotazo en la panza que ocasionó mi prematuro retiro inmediato de este deporte. Y pensar que de seguir ahorita podría tener una foto gigante en el paseo de la fama del Aeropuerto de Tijuana.

No volví a saber nada del equipo, ni de los compañeros ni del deporte, excepto que el entonces entrenador fue detenido hace algunos años por andar vendiendo droga afuera de una secundaria.

0 y tú que piensas?: